Tratamientos del Dolor
El tratamiento del dolor es un enfoque médico integral destinado a aliviar o eliminar el sufrimiento del paciente. Dependiendo de su origen, intensidad y duración, el dolor puede abordarse con diferentes estrategias terapéuticas, desde medicamentos hasta procedimientos avanzados.
El manejo del dolor debe ser personalizado y multimodal, combinando distintos enfoques para optimizar los resultados y minimizar los efectos adversos.
Clasificación de los Tratamientos del Dolor
1. Tratamientos Farmacológicos
Los medicamentos son la base del tratamiento del dolor y se dividen en dos grandes grupos:
1.1. Analgésicos No Opioides (Primera línea para el dolor leve a moderado)
- Paracetamol: De uso frecuente en dolor leve.
- AINEs (Anti-Inflamatorios No Esteroideos): Como ibuprofeno y naproxeno, eficaces en dolor musculoesquelético e inflamatorio.
- Corticosteroides: En casos de inflamación severa o enfermedades autoinmunes.
1.2. Opioides (Para el dolor moderado a severo, bajo control médico)
- Opioides débiles: Como tramadol y codeína, usados en dolores de intensidad intermedia.
- Opioides potentes: Como morfina y fentanilo, reservados para dolor severo o oncológico.
💡 Para más información sobre medicamentos específicos, consulta la sección «Medicamentos para el dolor».
2. Procedimientos Intervencionistas (Para dolor severo o resistente a fármacos)
- Bloqueos nerviosos: Inyecciones de anestésicos locales para interrumpir la señal del dolor.
- Radiofrecuencia: Técnica que inactiva nervios específicos para disminuir la percepción del dolor.
- Infiltraciones epidurales: Aplicación de esteroides en la columna para aliviar dolor lumbar y radicular.
- Estimulación medular: Implante de electrodos en la médula espinal para modular la transmisión del dolor.
- Bombas intratecales: Administración directa de medicamentos en el sistema nervioso central.